¿Estáis listas para emprender un viaje lleno de color, texturas y técnicas que cambiarán vuestra rutina de belleza? Pues agarrar fuerte la brocha que vamos a despegar en el mundo del automaquillaje. Hoy compartiré algunos valiosos «tips para el automaquillaje» que, con un poco de práctica, os permitirán resaltar vuestra belleza natural como unas auténticas profesionales.

Una Piel Preparada es el Lienzo Perfecto

Antes de empezar a maquillar, necesitamos un lienzo perfecto, ¿verdad? En nuestro caso, ese lienzo es nuestra piel. Lava tu rostro con un limpiador suave para eliminar cualquier rastro de suciedad o grasa. A continuación, aplica una crema hidratante para aportar suavidad y frescura a tu piel.

Si tienes imperfecciones o poros dilatados, considera usar un primer para preparar la piel antes de la base. Este producto maravilloso suaviza la textura de la piel y asegura una mejor adherencia y duración del maquillaje.

Base: Tu Segunda Piel

Escoger una base que se ajuste a tu tono y tipo de piel puede parecer un desafío, pero no temas, ¡es más fácil de lo que parece! Para saber el color adecuado de la base de maquillaje, debes elegir un tono que se adapte a al tono natural. Para ello puedes probar la base en tu cuello o mandíbula y ver si se funde con tu color natural de piel. Si tienes un tono frío, busca bases con tonos rosados. Si tienes un tono cálido, busca bases con tonos dorados o amarillos. Si tienes un tono neutro, busca bases con una combinación de ambos. También puede serte de gran ayuda usar las herramientas online que ofrecen muchas de las casas de cosméticos. 

Corrector: El Salvador del Día

El corrector es tu varita mágica para disimular ojeras, manchas e imperfecciones. Pero recuerda, al igual que el maquillaje, el corrector debe ser del tono adecuado, lo máximo un tono más claro que tu base para iluminar las áreas que deseas destacar.

Los Polvos Traslúcidos: Tu Escudo contra el Brillo

Si tienes la piel grasa o simplemente quieres mantener tu maquillaje en su sitio durante más tiempo, los polvos traslúcidos son tu mejor aliado. Con una brocha grande y suave, aplica los polvos con ligereza para evitar un acabado sobrecargado.

Tus Ojos: El espejo del Alma

Difuminar bien las sombras de ojos es el secreto para lograr un look de maquillaje profesional. Escoge sombras que complementen tu color de ojos y tu tono de piel y no tengas miedo de experimentar. ¿Y qué hay del delineador y la máscara de pestañas? El delineado preciso con un eyeliner líquido o en gel, seguido de una buena máscara de pestañas puede abrir tu mirada y definir tus ojos de una manera espectacular.

Cejas Definidas: El Marco de tu Mirada

Nunca subestimes el poder de unas cejas bien definidas. Rellena tus cejas con un lápiz o sombra en un tono similar al de tus cejas naturales para enmarcar tu rostro y añadir carácter a tu look. Pero cuidado, si lo marcas en exceso puede endurecer y obtienes el resultado contrario

Blush y Contorno: Juego de Luces y Sombras

Añade un poco de blush en las mejillas para aportar ese toque saludable y juvenil, y un poco de contorno debajo de los pómulos para resaltar la estructura de tu rostro. Jugar con luces y sombras te permitirá realzar tus rasgos más favorecedores.

Labios Atractivos: La guinda del Pastel

No olvides tus labios. Hidrátalos con un bálsamo y luego aplica el color de labios que prefieras. Para un color duradero, delinea tus labios antes de aplicar el lápiz labial.

Iluminador: ¡Brilla como una Estrella!

El iluminador es ese pequeño extra que puede llevar tu maquillaje al siguiente nivel. Aplícalo en los puntos altos de tu rostro para un brillo sutil y resplandeciente.

La Práctica Hace al Maestro

El automaquillaje es una habilidad, y como todas las habilidades, requiere práctica. Experimenta con diferentes técnicas y estilos hasta encontrar lo que mejor funciona para ti. Recuerda, el maquillaje es una forma de expresión, ¡así que diviértete!

El desmaquillado: La Última y Más Importante Rutina

Desmaquíllate siempre antes de irte a la cama. Este paso es esencial para mantener tu piel sana y luminosa. Usa un desmaquillante adecuado y luego lava tu rostro con tu limpiador habitual.

Conclusión

Con estos tips para el automaquillaje, tienes todo lo necesario para dominar el arte del maquillaje y resaltar tu belleza natural. Y recuerda, la práctica hace la perfección, así que practica todo lo que puedas y sobre todo no tengas miedo de equivocarte. Y si al final ves que hay aspectos que se te resisten, no dudes en recurrir a un profesional que imparta cursos de automaquillaje personalizados y a la carta y que sin duda te ayudará a superar de una forma práctica y divertida esos detalles. ¡Arriba esas brochas, bellezas!